La compañía biotecnológica mAbxience, especializada en el desarrollo de biosimilares, en concreto, anticuerpos monoclonales, ha inaugurado hoy en León la primera planta con tecnología Single Use de España dedicada al desarrollo de estos medicamentos. Las instalaciones acogerán los trabajos de desarrollo del pipeline del grupo y se espera que, en el futuro, puedan alojar la producción de los medicamentos biosimilares con los que se abastecerá a los principales mercados regulados.

Desde sus comienzos en el año 2009, la compañía lleva invertidos más de 115 millones de euros, lo que representa una de las mayores inversiones de un grupo de origen español en un proyecto de biotecnología.

mAbxience adquirió la planta a Genhelix en mayo de 2014 por 11 millones de euros. Desde entonces, ha destinado 14 millones adicionales a acondicionar las instalaciones y adaptarlas a las necesidades del proyecto; un esfuerzo económico que ha permitido convertir la planta en un referente europeo en el campo de la investigación y el desarrollo de biosimilares.

Según el fundador de mAbxience, Hugo Sigman, “disponer de una planta de estas características en Europa refuerza nuestros planes de internacionalización pero, sobre todo, contribuye a hacer más accesibles estos medicamentos. España es un país que conocemos muy bien por lo que era el lugar ideal para iniciar este proyecto. De ahí nuestro compromiso con apoyar su crecimiento a través de nuestra apuesta por un sector de gran valor añadido social y económico como es la biotecnología ”.

La tecnología más avanzada

En este sentido, mAbxience ha hecho una firme apuesta por la innovación tecnológica, dotando a sus instalaciones de los procesos más vanguardistas. Tanto es así que la planta de León es la primera de España que cuenta con tecnología Single-Use instalada en todos sus procedimientos. Esta tecnología consiste en el uso de biorreactores desechables que aportan mayor flexibilidad y permiten un ahorro significativo de recursos en los procesos de producción.

Las instalaciones de León tienen una superficie total de 16.000 m2, de los cuales más de 5.500 son de desarrollo y producción, que incluyen una planta industrial con biorreactores de 2.000 litros, una planta piloto, laboratorios de I+D, laboratorios de control de calidad y almacenes.

Firme apuesta por el empleo y la retención del talento

Actualmente la compañía cuenta con más de 160 trabajadores de los que más de 60 están ubicados en León. De hecho, en el último año, la plantilla de la capital leonesa se ha multiplicado por  seis.

Según el director general de mAbxience, Carlos Bañado, “nuestro compromiso con el empleo y con la captación y retención del talento nacional y local es máxima. Nuestros equipos están formados por expertos en el campo I+D de los anticuerpos monoclonales. Son equipos multidisciplinares, jóvenes y con un perfil internacional, lo que apoya nuestra intención de convertir a León en referente  europeo en el desarrollo de biosimilares”.

Un objetivo: la accesibilidad

Se estima que los biosimilares se comercialicen inicialmente con un descuento importante respecto al precio del fármaco de referencia; aunque la rebaja podría aumentar conforme la competencia en el mercado se incremente.

De esta manera, los biosimilares podrán liberar recursos que puedan ser destinados a garantizar la accesibilidad de más pacientes a terapias biotecnológicas y a financiar aquellos tratamientos que todavía no disponen de alternativa, contribuyendo al mismo tiempo a la sostenibilidad de  los sistemas nacionales de salud.

Sobre mAbxience

mAbxience es una compañía biotecnológica especializada en el desarrollo y fabricación de anticuerpos monoclonales biosimilares que pertenece al Grupo farmacéutico Chemo. Fundada en 2009, actualmente cuenta con dos plantas de desarrollo y producción en León (España) y Buenos Aires (Argentina). En diciembre de 2014, lanzó al mercado su primer biosimilar, Rituximab, en Argentina.

mAbxience mantiene un compromiso de globalidad y a su vez, apuesta por los más altos estándares de calidad, con el objetivo de favorecer la penetración de los medicamentos biosimilares. Tanto es así que denomina su metodología de trabajo como Fingerprint-like -en alusión al concepto acuñado por la FDA-, según el cual garantiza que cada producto es similar al original, con la misma fidelidad genética y precisión que una huella humana.

La compañía, que cuenta con un equipo de más de 160 profesionales en todo el mundo, ha invertido más de 115 millones de euros desde que comenzó su actividad hace seis años.

El Grupo Chemo, fundado en Barcelona en 1977, cuenta con más de 35 años de actividad en todos los eslabones de la industria químico-farmacéutica, y dispone de un equipo profesional de más de 5.000 personas, estando presente en 40 países de todo el mundo.